lunes, 8 de octubre de 2018

La mentira de VOX

Había en medios y redes un encendido debate sobre si hay que hacer difusión o no de los actos del partido político VOX. Siempre he sido de la opinión de que las realidades hay que encararlas y por supuesto es lo que haré con esta formación y cada uno de sus mensajes.

Hemos de superar el debate estratégico de si medios y redes son los guardianes de lo que realmente está pasando en nuestro país, o en cualquier punto de la sociedad, y aceptar que medios y redes son únicamente portadores de esas realidades y que sólo reflejan la intensidad de cada momento.

Vayamos a las propuestas, que son éstas: https://www.voxespana.es/biblioteca/espana/propuestas-memes/100medidasgal_dbed3f181006061406.pdf

Tratando esta propuesta con la seriedad que merece cualquier propuesta política habría que empezar por citar la nula seriedad de las medidas económicas, pocas y la mayoría inconcretas. Es decir, como todos los partidos que prometen cualquier cosa para quedar bien con su posible electorado. Un clásico.

No hay un programa o anexo económico que se adjunte a esta propuesta para hablarnos de cómo van a financiar esas medidas a través de los presupuestos generales del estado. Tampoco existe en su web un análisis mínimo de alguno de sus líderes sobre cómo abordar estas materias. No hablan de la deuda externa del Estado, del déficit de las corporaciones locales por asunción de competencias impropias pero si que se atreven con una medida estrella, "liberalizar el suelo" para que sea apto urbanizarlo todo menos lo que sea "convenientemente justificado" excluir. Ya conocemos esa receta, se llama burbuja inmobiliaria y nos costó 60mil millones de €, que sepamos hasta la fecha y un incontable número de dramas humanos y familiares.

VOX hace especial hincapié en suprimir el estado autonómico y propone centralizar todas las competencias al máximo. Con ello, no sólo pretende retrotraernos 40 años atrás en materia de desarrollo territorial sino que además peca de no haber aprendido una lección que a la derecha nunca le ha gustado, la vertebración de las diferentes identidades que conviven en el Reino de España. Es no haber aprendido de la historia del lugar donde se vive. Y lo que ha pasado en nuestro país cuando la derecha se ha envalentonado, alcanzado el poder y actuado sobre la vertebración territorial, también lo conocemos, se llama dictadura.

Otra de las especiales atenciones recae sobre la nación, su protección y la necesidad imperiosa que tenemos de echar de España al que no sea realmente español. Migración ilegal, insultos a la corona y desterrar las lenguas cooficiales de la función pública son elementos que ligan a la integridad de nuestra patria. Es un cóctel y por tanto hay que separar los ingredientes para comprenderlos.

Para VOX insultar a la bandera o al Jefe del Estado debería estar penado gravemente. Cualquier migrante que cometa un delito grave debe ser expulsado y la riqueza cultural de nuestros pueblos no es más que algo anecdótico... como una toque de color de la primavera. Se olvidan, por supuesto, de las grandes conquistas de las democracias consolidadas, como son, a este respecto: la libertad de expresión, la necesidad de los flujos migratorios que frenen el envejecimiento de la población y el hecho de que la pluralidad cultural ha de ser asumida por el conjunto de la sociedad para que ésta pueda expandirse y seguir creciendo.

Una lectura pormenorizada de las 100 medidas de "La España Viva" rebautizando el "Viva España" de toda la vida del señor, nos dará una clara impresión de que estos señores no son serios, como no lo han sido nunca. Aunque hayan especificado entre todas las medidas que hay que recuperar Gibraltar. Se trata de la propaganda más barata y quieren aprovecharse, una línea tras otra, del miedo transformándolo en odio.

Incluso hay una medida de entre todas que pudiera parecernos a simple vista un acierto. La consecución de energías limpias y renovables con el objetivo de la "autosuficiencia". Observemos el detalle. No hablan de contribuir a un planeta más justo y de progreso social, sino de autarquía, la receta de la derecha de siempre.

Se quejaban en su mitín de Vistalegre de que los llamaban "fachas" por todo esto y por más. Lo cierto, es que son fachas y tienen la libertad de serlo por la mayoría de las leyes que ellos mismos pretenden eliminar. Eso es el fascismo. Y por eso son un peligro del que hay que hablar, pero que no hay que respaldar con votos.

El problema con VOX (sí, es un problema) no es tanto lo que dice, sino lo que NO dice. Cuando hablan de "inmigrantes" y de su expulsión no se paran ni un momento en hablar de humanidad, ni de salvar vidas, ni de reconocer el esfuerzo y la tragedia de quiénes se juegan la vida por venir a ofrecernos su trabajo y su experiencia. Hablan de la defensa de la vida desde su concepción, pero ni una palabra de las vidas que se quedan en nuestras costas o que precisan de asistencia médica porque no reconocen como un asunto Salud Pública a los migrantes que están entre nosotros, a los que derivan únicamente a los servicios de urgencia. No es serio porque ya lo aplicó el PP en sus años de gobierno y generó problemas mayores, no es consistente porque al eliminar la atención primaria se producen más gastos y, sencillamente, no es humano.

La última perla de esta lectura es que quieren que las mujeres no puedan abortar sacándolas de la sanidad pública, porque según ellos es una "intervención quirúrjica ajena a la salud" al igual que las operaciones de cambio de sexo.

Sí, yo también tendría miedo de esta panda. Pero el miedo se vence con valor, con el valor de rebatir cada una de las medidas que han propuesto, con la fuerza de la democracia que entre todos nos hemos dado y con la memoria viva de España, que ya vio una vez qué pasó cuando esta gente gobernó nuestro país.

No les votes, que no vuelvan.