José Luis Rodríguez Zapatero ha sido, con diferencia, el mejor Presidente de Gobierno de nuestra joven democracia. Y lo ha sido de forma contundente por el calado y la trascendencia de las políticas que ha puesto en marcha.
Sus gobiernos, centrados en la labor de extender el Estado del Bienestar, han conseguido ampliar derechos, todos los derechos. Las mujeres, las personas mayores, la infancia, los jóvenes, la población LGBT y sobre todo el sentido de ciudadanía se ha visto crecido. El sentido crítico de la población ha tocado niveles que no habíamos conocido antes y eso porque hemos podido disfrutar de esta época de libertades.
Ese es el principal ariete de batalla para la derecha en este país, ellos nunca han querido que, simplemente, pensáramos. Gobierne quien gobierne tras el 20 de Noviembre, es algo que ya no podrán arrebatar a la ciudadanía, nuestro sentido crítico.
La tarea fundamental ha estado, en los últimos años, fundamentada en la lucha contra la crisis económica y en esta labor, José Luis Rodríguez Zapatero, no ha olvidado que quiénes peor lo podían pasar eran precisamente los que más atención debían recibir. Por eso ningún ciudadano se ha visto privado de alguna asistencia, cosa contraria hubiera sucedido si hubiera sido la derecha quien gobernara en este país, no hay más que acordarse lo que hizo el PP con la población desprotegida en sus años de gobierno.
Es por ello por lo que, pese a todas las dificultades y algunos errores, puedo decir que me siento orgulloso de haber confiado y votado a este Presidente que ahora da el relevo para que sigamos creciendo. Es mi opinión, mi humilde opinión. Usted querido lector, sea crítico, siempre crítico, tire de hemeroteca y vea realmente cuáles han sido los avances en estos casi 8 años y cuáles las propuestas que otros habían puesto encima de la mesa.
El PP representa sacar a los jóvenes de las aulas para ponerlos a trabajar en las construcción y en los servicios. Representa anular los derechos de conciliación de la vida de las mujeres, la anulación de los derechos de homosexuales, representa una política exterior bélica, la dogmatización de la población y la manipulación de los servicios públicos, la privatización de los mismos y la carestía de la vida.
El 20 de noviembre, mi voto no faltará para apoyar a Rubalcaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario