Las puertas no están abiertas, sino entornadas. Con este mensaje nos han despachado las críticas a las últimas acciones sobre "población peligrosa" el gobierno francés, al respecto de las expulsiones de población gitana.
Esta noticia no es sólo peligrosa en la misma acción de la expulsión, se nos escapa el último dato. Más del 50 % de la población encuestada apoya la medida del ejecutivo galo. Debe ser, deduzco al leer la encuesta, el mismo porcentaje que apoyaba los mensajes lanzados por el Frente Nacional francés, la Liga de las Familias de Polonia, la Liga Norte de Italia o el Partido Nacional británico, por poner sólo ejemplos representados en el Parlamento Europeo, esa cámara que rebosa democracia y humanismo.
Tremenda la hipocresía que inunda Europa. Podemos aplicar las promesas de la ultraderecha sin ser considerados posfascistas, porque lo hacemos con las siglas de la socialdemocracia o de la democraciacristiana europea. En ese caso sólo somos... extremadamente protectores.
Flaco favor en Europa está haciendo Francia (Libertad, Igualdad, Fraternidad) haciendo lo contrario que hicimos en España, que fue sacar del mercado negro y la economía sumergida a una de las mayores bolsas de pobreza del continente.
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