Tengo un compromiso y lo he adquirido por voluntad propia. He querido estar e integrarme en las necesidades y las carencias de quiénes me rodean, en lo cercano y en lo no tan cercano.
Estuve en el instituto luchando por una selectividad más justa, en europa en contra de la directiva europea del trabajo, en el sahara apoyando al frente polisario, en la universidad en contra de la subida de tasas, en la administración pública por las reivindicaciones de los más jóvenes, en el movimiento gay por el derecho al matrimonio y ahora en la Región de Murcia para que, tras 16 años de gobiernos de derechas, tengamos la oportunidad de vivir mejor.
Es mi compromiso porque siempre he pensado que luchando se consiguen los objetivos y he decir que entre todos, podemos conseguirlo. Y la prueba es que con mi esfuerzo sumado al de muchas personas más en muchas partes conseguí (y conseguimos) que la selectividad sea más justa (ahora el sistema de puntuación es más completo), el frente polisario tenga más recursos (España ha doblado sus donaciones en recursos al territorio), la universidad pública está mas asentada (no dobló las tasas y hay el doble de becas), y tengo derecho a casarme desde 2004.
Ahora es el momento de darle la vuelta a esta tierra, la mía, la de casi un millón y medio de personas que viven y trabajan en esta Región. La tierra que me vió crecer, la de mi amado mar menor, la de las playas interminables en calblanque, la tierra del color ocre de la sierra minera. Esta tierra en la que me he formado y crecido con el esfuerzo de mis padres, de los míos y sin nada que agradecer a quiénes gobernaron los últimos 16 años, porque sólo se preocuparon de hinchar sus barrigas y hacer crecer las de sus amigos.
Ahora, tú que me conoces, que sabes de mi compromiso con la realidad, con la lucha de los más necesitados, que me has reñido por no quedar contigo porque me tenía que ir a una acampada solidaria o porque esa tarde estaba en una manifestación, ahora te pido que te acerques a la realidad de la mejor forma que podemos, todos, hacerlo.
La urna es el destino final de todas nuestras ilusiones y esperanzas e incluso de nuestras decepciones. Así es que, te pido que, el domingo, vayas a la urna y votes.
Yo lo haré conforme a mi compromiso, al Partido Socialista y en esta ocasión formando parte de una de sus candidaturas. Tú haz lo que creas más conveniente, pero participa, acude a votar y con todas tus fuerzas sé consciente de que tú, con tu voto, lo cambias todo.
Cambialo y #dalelavuelta.
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