Hoy en la prensa oficial escribe Francisco Rubio Miralles que más nos valdría a todos hacerle caso a Benedicto (habemus papa josefo) en todo, y en especial sobre el último mensaje navideño que ha pronunciado, el cual versaba sobre la pobreza.
Este señor, que es el delegado episcopal de enseñanza (y no se cuántas cosas más) se permite el lujo y la excelsa ignorancia de proclamar en su artículo que la expansión del virus del SIDA tiene que ver más con la promiscuidad sexual que con otros factores. Simplemente aterrador, pasen y vean:
http://www.laverdad.es/murcia/20090104/murcia/subdesarrollo-moral-20090104.html
No quisiera yo tenerlo cerca como médico señor Rubio.
Olvida el prosaico delegado episcopal que lo que más ha propagado el SIDA y sus tremendos efectos ha sido la ignorancia. La ignorancia promovida, organizada, financiada y alentada desde la Iglesia Católica, su jerarquía y sectas más potentes (Opus, Legionarios..) y que en lugares como África se han convertido en la principal causa de muerte en todas las franjas de edad por encima del hambre o la guerra.
Rebatidos los datos objetivos ahora puedo decir... estoy hasta los mismisimos huevos de que los sacabarrigas de toda la vida quieran seguir viviendo a costa del pueblo contándoles las trolas más impresionantes sin que se les caiga la cara de vergüenza.
A picar piedra y a hacer carreteras... jilipollas.
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