jueves, 14 de enero de 2010

No te rasgues las vestiduras, rásgate las bragas

Pilar Portero en Tu2is:

Las viejas también tenemos derecho a gozar con la carne fresca. Amparados en que Iris Robinson había actuado contrariamente a lo que predicaba y que además había aprovechado sus privilegios políticos para favorecer a su joven amante, esta sociedad de doble moral se está cebando en la adúltera.

En lugar de con piedras, los mismos periodistas que condenan la sharia -antigua ley islámica que impone la lapidación en caso de adulterio y sigue vigente en multitud de estados musulmanes-, la machacan con ácidas ironías. No se plantean que harían ellos, y ellas -que también se han dejado arrastrar por el pensamiento único-, si un yogurín/a se les entregase. ¿Lo rechazarían? ¿No le ayudarían a progresar en la vida? ¿no justificarían sus lujuriosos deseos disfrazándolos de amor? Venga queridos fariseos, que este planteamiento tópico no es ciencia ficción. Os he visto en la redacciones, en las empresas, en los partidos, en la universidad.... babear, hacer el ridículo y favorecer sin tapujos a ese tierno objetivo.

Los casos de Ronnie Wood, guitarrista de los Rolling Stones, de 63 años, que hace unos meses se echó de novia una modelo rusa de 19, Ekaterina Ivanova, con entrada propia en la wikipedia desde el affaire o el de Madonna y Jesús Luz -30 años de diferencia-, el modelo brasileño con una mamá más joven que su chica, no son tan criticados porque se dedican a la farándula. Pero es que a los políticos y empresarios también les gusta el sexo, y además no les resulta difícil de conseguir gracias a la erótica del poder. Si a Elena Cúe, la joven y guapa mujer de Alberto Cortina, de quien le separan casi 30 años, le hubiera tirado los tejos el conserje de la finca igual no se le había disparado tanto la libido.

A mi que Iris Robinson no sea fiel a su discurso no me parece un pecado capital. La tendencia a ser autocomprensivos es un rasgo general. En cambio, que no se le ocurra al vecino cumplir tus propias fantasías porque le quemarías en la plaza pública. La diputada irlandesa ha saboreado la estimulante ingenuidad de la juventud y se ha demostrado a si misma que sigue en el mercado. Su amante, Kirk McCambley, mayor de edad, ha sabido lo que es echar un buen polvo además de ver realizado su sueño profesional abriendo un café. Lástima que la criatura tuviera que mentir, alegando padecer un cáncer genital, una vez saciadas sus demandas.

La contradicción es una característica innata del ser humano. El presidente Zapatero acaba de aceptar la invitación de Obama para sumarse al Desayuno Nacional de Oración el próximo día 4 de febrero, y eso que nuestro presidente es agnóstico.

Pues nada que el que esté libre de pecado tire la primera piedra. Pero, por favor, que no me vaya a caer a mi. Yo, sin duda, prefiero rasgarme las bragas a las vestiduras. Qué rebíblico me ha quedado todo, hasta parezco periodista.

No hay comentarios: