Para el PP, menos es más.

Hoy está lloviendo en la Sierra Minera, aunque les aseguro que no ha habido ningún desfile (o procesión) en los últimos días con rezos para la pluviosidad. Y sin embargo me he desayunado con la confirmación periodística de algo que ya muchos sabemos y la mayoría de la ciudadanía intuye: La Región de Murcia ha entrado en el catálogo de Naciones Unidas como zona en desertificación, con alto riesgo de que en los próximos años nos convirtamos en otro arenal más.

"Por comunidades autónomas, de nuevo Canarias y Murcia son las que tienen una mayor proporción de superficie con riesgo significativo de desertificación, con cerca del 80 por ciento de su territorio amenazado" (Europapress cita textualmente fuentes oficiales). Bien, una vez más, la acción de gobierno nos sitúa al final del final, en esta ocasión junto al archipiélago africano, en geografía, Islas Afortunadas en política (nadie se extrañe de que en áfrica la desertización sea evidente).

Pero Valcarcel está contento.

Los 34 campos de golf adheridos a las innumeradas macro-urbanizaciones y veintena de resorts que se están construyendo le tienen el ánimo subido, a él y al alcalde de Totana. Para los que no lo sepan aún, la fiscalía anticorrupción hace más horas extras en la Región de Murcia que un camarero de barra en chiringo de verano.

El modelo económico del PP murciano no es que esté acabado, no se va a construir todo lo que hubieran querido, sino que además sucederá lo que pocos nos atrevimos a decir en su día y que la tendencia no ha venido sino a confirmar, que en menos de que esta tierra sea pasto de las dunas el sector de la construcción e inmobiliario (o de turismo residencial que le gusta decir al del anuncio de PPolaris) pegará el "crujío" con el consiguiente descenso en el mercado laboral.

Pero Valcarcel está contento.

No hace mucho, las propias cámaras de comercio alentaban a algunas intituciones públicas (leáse informe BBVA) de que deberían empezar YA a reciclar su suelo laboral, esto es, a ir progresivamente cambiando de modelo ya que éste (ladrillo + golf + superpisci) había tocado a su fin y que no había tanto guiri y madrileño interesado en nuestra costa, y menos ahora q la habíamos llenado de porquería.

No hace mucho, Greenpeace, esa organización fatídica que se dedica a atormentarnos a todos proque son un atajo de masones, nos mostró los efectos más que probables del cambio climático en las costas de la Región. Concretamente en las que figuran en la fotografía superior, la láguna del Mar Menor. Esa misma láguna que sigue menguando y que ya tiene menos de sus 174 km cuadrados originales.

Pero Valcarcel está contento.

"Un campo de golf precisa, por termino medio, 500.000 metros cúbicos de agua al año ¿Es posible mantener 34 campos de golf en Murcia, la región que más riesgo de desertización padece en España, según dijeron sus gobernantes en el momento de pedir la aprobación del Plan Hidrológico Nacional?"

Cita del programa Linea 900, es una pregunta formulada al Gobierno Regional del PP, ésta es la respuesta:

“Los campos de golf se regarán con aguas recicladas”.

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En fin, que mañana os cuento otro, y espero que siga lloviendo que buena falta nos hace (y a los campos en golf también).